Wednesday, August 25, 2010

Capicúa

Todo sacado de Twitter, saltando de uno en otro casi al azar, luego de ver el video de Camiroaga pidiendo a Hinzpeter que paren la central en Punta de Choros...
Chile se parece a Macondo a veces, otras tantas uno no sabe quien trabaja para quien, y siempre, casi siempre, por la boca muere el pez:

@pedroruminot LLEVA EN LOS GENES EL ANTIFACHISMO ... ADEMÁS POR HACER SUBIR EL RATING HACEN CUALQUIER "WUEA", NO ES DE EXTRAÑAR ..


@Skoknic
El tipo q limpia los 36milm2 de vidrio de la Torre Titanium vive en una caseta en CerroNavia. No tiene vidrios. Así me gusta Chile.


@marcelodiazd
Camir le hizo propaganda a Frei, quien inaguró la central Termoeléctrica de Guacolda, que tiene Huasco sumergido en polución.

Sunday, August 22, 2010

Carta Abierta a Laurence Golborne

hola Laurence,

No tengo el gusto de conocerte en persona, pero me permito hablarte en tono directo apelando a que estudiamos en el mismo colegio, yo algunos años después que tú.

De seguro nos tocaron muchas cosas distintas, pero no dudo que muchas, muchas otras, fueron similares: estudiar con frío en las salas, los bancos de madera fijos, viajar un buen tiempo en esas micros antiguas para llegar al colegio temprano y luego volver a la casa.
Por otro lado, obviamente, tu carrera profesional en uno de los holdings más importantes de Chile es dificilmente alcanzable, y vayan mis reconocimientos a tu trayectoria. Por eso mismo, me sorprendió, pero también me alegró, ver que aceptaste ser ministro. Lo comentamos con algunos compañeros de curso en su momento.

Ahora, estás más expuesto que nunca a la vitrina pública, y eso deber ser agotador. Más aún con una crisis como la de la mina San José: posiblemente, esta experiencia te ha hecho ver una realidad laboral que no imaginabas, te ha enfrentado a empresarios irresponsables y codiciosos, ha puesto en evidencia una cadena de ineptitudes de oficinas públicas. Quizás, hasta corrupción puede haber en esta historia.
En resumen, seguramente en las últimas semanas has podido ver un Chile que no conocías, y que muchos de nosotros tampoco conocemos realmente. Quizás lo sospechamos a veces, pero sin verlo, ni menos vivirlo. Un Chile que ha ido sumando y sumando el desgaste de al menos los últimos 50 años, con sus quiebres, errores garrafales y egoísmos.
A veces pienso en la fatiga de material como metáfora: hemos abusado de nuestra suerte, hemos forzado nuestras riquezas naturales y culturales, y ahora, ya entrado al siglo XXI, nos quedan pocas reservas. Chile está cansado.
Quizás por eso, una gran fuerza natural como el terrremoto dejó en evidencia todas las falencias en cuanto a prevención y reacción a desastres. Un tremendo accidente laboral nos deja en evidencia que muchos chilenos trabajan en condiciones miserables. Y de seguro, hay muchas otras realidades que no conocemos por que aún no ha pasado nada grave.

Imagino que esta etapa de tu vida será imborrable, y supongo, casi sin dudar, que todo esto te ayudará a ser un mejor ministro. Más aún, ojala puedas proyectar tu experiencia a otros ministros: hay que calibrar los tecnicismos con la experiencia del Chile real, del trabajador sacrificado.
Hay mucho, quizás demasiado, por mejorar, avanzar y crear en Chile.

Pensé en escribir esta carta abierta hace unos días, pero creí que era una idea irrelevante. Hoy, unas pocas horas después de que los rescatistas han llegado por fin a la zona de búsqueda de los mineros, pensé distinto y la he escrito. Más que nada para que la lean otros compañeros del colegio, y me den sus comentarios y/o críticas. Ojala también sea de interés para otras personas.

Inicialmente, consideré terminar estas palabras pidiéndote algo, ya fuera en tu calidad profesional o en el plano político. Pero mientras la escribo me doy cuenta que más bien somos nosotros, el resto de tus compañeros de colegio, los que deberíamos dar algo. Para empezar, diría que muchos te apoyamos a la distancia con la sabiduría, paciencia y claridad mental que de seguro cada día necesitas en enorme intensidad. Diría también que muchos de nosotros, de ser necesario, aportaríamos tiempo, esfuerzo, conocimiento o redes sociales para apoyar lo que sea necesario en pro del bienestar de Chile.

Tuvimos la suerte de recibir parte de una tradición tremenda. Muchos, desde nuestros pequeños o grandes espacios personales, tratamos de aportar a esa tradición. No dudo que tú también aspiras a eso, aprendiendo sobre todo de los errores personales y ajenos.

Mucha suerte y éxito en tus decisiones y responsabilidades.
Y como bien sabes, labor omnia vincit.

Te saluda,
un compañero de colegio

Eduardo "Nacho" Correa Caro
4°I, 1989